viernes, 4 de septiembre de 2009

cartas a la Reina de Corazones 4: Amina de Zaria


Reina:

Quienes nos hemos interesado de alguna u otra forma en la historia militar del mundo tarde o temprano nos topamos con la interrogante de cuál ha sido el papel de las mujeres en el gran drama humano que es la guerra. Desde luego, dese siempre han sido víctimas principales de los excesos y arbitrariedades de los vencedores, han sido masacradas, secuestradas y violadas por siglo por los ejércitos triunfantes que las han visto como trofeos de guerra. Pero también existe la otra cara, la de aquellas destacadísimas líderes militares y estrategas que lejos de conformarse con el papel de resignadas mártires se han convertido en grandes protagonistas de los campos de batalla. Ya hemos visto que la inexcusablemente olvidada historia de África nos ofrece insignes ejemplos de reinas guerreas que han sido empecinadas luchadoras por la libertad e inspiración para la independencia de sus pueblos. Hoy veremos a una gran reina conquistadora que fundó un imperio en lo que hoy es el norte de Nigeria, en las zonas que bordean el majestuoso Río Níger, prototipo de osadía, inteligencia y capacidad de mando: la portentosa Amina de Zaria (1533-1612), reina del pueblo Hausa, cuya leyenda –entre otras cosas- fue el modelo en el que se inspiraron los creadores de la famosa serie de televisión “Xena”, ¿Te acuerdas, Amore?.
Los hausas son una de las etnias más importantes de África Occidental. Habitan principalmente en la zona semidesértica del Sahel. Son actualmente mayoría étnica en el norte y centro de Nigeria, el país más poblado de África, y de Níger, uno de las naciones más pobres del mundo. Los hausas son mayoritariamente musulmanes, de lo que se ha derivado deriva una gran paradoja en la historia de las mujeres y que te cuento al final de esta cartita.

Amina fue la primogénita de la reina Nikatau, quien a su vez fue hija del monarca que fundó el reino hausa de Zaira (Zazzau) sobre el río Níger cuando aún existían los residuos del Imperio Songhai, glorioso imperio medieval africano el cual construyó la ciudad de Tombuctú (de ahí es el famoso “Trucutrú”, de quien ya te he platicado). Su padre, aunque tenía excelentes relaciones con el emperador Songhai, prefirió mantener su autonomía. La madre de Amina había tenido buena disposición hacia el entrenamiento militar cuando joven y fue de ella fue la indómita Amina heredó talento para las armas. Tras la muerte de tan vigorosa madre, en 1566, el hermano mayor de Amina, Karama, ocupó el trono tras la muerte de la reina, pero el trono quedé vacante tras morir Karama en batalla. Entonces ya la guerrera estaba más que lista para asumir el cetro. Te recuerdo que en la mayoría de estas grandes civilizaciones africanas no existían restricción en las sucesiones Reales respecto al sexo. Con el imperio Songhai en franca decadencia y con los europeos merodeando por todos lados con la cruel intención de hacer a todos negros esclavos, Amina optó por fortificar sus ciudades con fuertes murallas que protegieran a los habitantes de cualquier invasor. Todas las ciudades-estado de los Hausa pronto tuvieron sus inexpugnables fortificaciones, y una vez que esta hermosa amazona tuvo bien resguardadas sus ciudades, comenzó su plan de expansión.

El declinante imperio Songhai había estado proporcionando oro y esclavos a los colonialistas europeos de forma incondicional, pero no conformes con eso los europeos se ambicionaban controlar las minas di’oro que estaban dentro del territorio de Amina. Ella no esperó a-ver-que-pasaba ni se dedicó a comer manzanas, como hacen los soldaditos rumanos de “Última Noche de Amor, Primera Noche de Guerra”, sino que atacó ella primero, todo un ejemplo de que hoy se conoce en el argot militar como “ataque preventivo”. Fue así que comenzó a conquistar territorio para su propia nación, añadiendo más ciudades –estados, expandiendo así sus fronteras y dominio militar en una extensión sin precedentes. Amina siempre marchaba a la cabeza de sus huestes y jamás retrocedía en las batallas. Llegó a dominar la que ahora es la ciudad nigeriana de Kano, importante centro de comunicaciones entonces y ahora.

Sus soldados llamaban a su excepcional comandante con el no poco machista apodo de “Yar Bakwa ta san rana”, lo cual en lengua hausa significa “Amina hija de Bakwa, mujer tan capaz como un hombre.”Otros gobernantes comenzaron a rendirle tributo, enviándole nueces de kola y eunucos como regalos. Otros le pagaban fuertes impuestos. Entre los enemigos políticos de Amina se contaban a varios reyezuelos blandengues y pusilánimes, como el califa islámico de Marruecos y el sultán Ahmed Al Mansur, quienes solamente sabían responder “sí señor” a los europeos. El más cobarde era, sin duda, Askia Isshac, el indigno último emperador Songhai.
Durante 34 años más o menos, Amina demostró que era la mejor guerrera del mundo. Pero ella no sólo destacó como invicta mujer de armas. También favoreció el comercio. Promovió la prosperidad a su nación a través de la exportación de sal, oro, corceles y algodón. Cómo potencial madre, la guerra le hizo pagar un alto precio: se le malograron tres embarazos por ir a batallar en plena gestación. Se dice que tras cada victoria la reina escogía entre los nobles y soldados del ejército vencido al caballero que más le cuadraba para pasar la noche con él. El privilegiado era asesinado a la mañana siguiente. Se cree que tras su tercer malparto la soberana quedó imposibilitada de volver a quedar encinta. También debió padecer que Zahsa, su sobrina predilecta e hija de su hermano Karama, muriera embarazada durante una de las batallas. Amina, quien la amaba como hija propia, nunca se perdonó a sí misma haber permitido que la muchachía participara en combate.

La reina también tenía su lado femenino amable. Adoraba a los niños y a los animales. Tenía a su camello favorito, que se llamaba Ki, Sobre el cual comía y dormía durante sus campañas. Era también de varios fino corceles de extracción árabe que le había arrebatado a unos esclavistas musulmanes. Pero su consentidazo fue el malcriado elefante Sou, quien una vez se le perdió por ¡20 días! Por andar “pajareando”. La inflexible guerrera derramó entonces las únicas lágrimas que se conoce que ella soltara en público. Afortunadamente, el travieso elefantito le fue devuelto por unos comerciantes árabes, quienes le cobraron un fabuloso rescate. Dicen quienes lo encontraron que Sou presentaba una imagen de animalito desconcertado y triste, muy sucio y con las pezuñas sin cortar, gordo por haber abandonado la estricta alimentación al que la reina lo tenía sujeto por andar comiendo cuanta porquería se encontraba en el camino.
Amina moriría en 1610, al parecer en batalla, aunque las versiones son contradictorias. Cuando se supo la noticia en Europa, muchos de los protervos comerciantes de esclavos soltaron un suspiro de alivio. Quizás ese fue uno de los tantos piropos disfrazados que esta reina coleccionó a lo largo de su vida como guerrera infatigable, monarca justa y mujer incomparable
Cuatrocientos años después de que el norte nigeriano fue testigo de estas hazañas protagonizadas por una mujer, otra Amina hizo historia, pero de una manera muy diferente: como símbolo de la aciaga subordinación a la que están sometidas las mujeres en las fanáticas regiones musulmanas. Se trata de la tristemente famosa Amina Lawal, mujer campesina y analfabeta miembro de una numerosa familia hausa musulmana. Amina dice no tener recuerdos de de su infancia (si es que tuvo alguna) y que a los 14 años se casó por primera vez. "Cuando era niña trabajaba en casa ayudando a mi madre. Luego me casé por primera vez y tuve dos hijos. Mi marido empezó a tener problemas económicos y me abandonó. Me casé por segunda vez, pero me volví a divorciar. Ésa vez fue porque mi marido me maltrataba, era impotente y me prohibía ver a mis padres". Meses más tarde, la policía islámica la detuvo con una hija recién nacida en sus brazos bajo la acusación de adulterio. Ella dijo que era hija de su nuevo novio, Jahaya Mahmud, quien la había convencido de mantener relaciones sexuales con la promesa de que se casaría con ella. “Ándale, dame la prueba di’amor”, le dijo.

Mahmud juró ante el tribunal que no era el padre de la chamaquita. “No seas mahmud y di la verdad”, le reclamó Amina, pero el Mahmud fue liberado sin cargos mientras Amina era condenada, en febrero de 2002, a ser llevada a un lugar público, enterrada hasta el cuello, y lapidada hasta la muerte. Para el tribunal islámico que la juzgó no estar casada y haber tenido una hija constituía una prueba del delito de adulterio contra anterior marido, el zoquete impotente que la maltrataba. Afortunadamente el caso trascendió a nivel internacional gracias a la intervención de varias Ong’s defensoras de los derechos humanos, lo que evitó que esta atrocidad fuese perpetrada. Esta es la paradoja que vivió el norte de Nigeria con sus dos Aminas más célebres: la campeona estratega y la víctima del fanatismo y la ignorancia actual.

viernes, 28 de agosto de 2009

Titanes de la Sátira: Benjamín Disraeli


Quizá mi personaje favorito de todos los tiempos es Benjamín Disraeli, descomunal político y escritor inglés quien fue también un artista de la sátira y del fino sarcasmo. Nacido en Londres en una familia judía de origen italiano, fue hijo de un muy agradable señor que estaba entregado por completo a sus tareas literarias. En la escuela y siendo muy niño, D. cobró conciencia de la diferencia que existía entre él y el resto de los párvulos, por eso su padre, convencido de que se judío sólo podría acarrearle dificultades en el seno de la intransigente sociedad inglesa, decidió bautizarlo. Disraeli siempre fue un hombre extremadamente inteligente y sensible dotado de una poderosa imaginación, orgulloso y con una poderosa ambición que siempre lo indujo a ser el primero en todo. Sus características de líder y amor por el drama y la literatura hicieron que formase una compañía de teatro estudiantil. El estreno de su primer obra (una sátira, desde luego) le causó su expulsión del severo colegio anglicano donde estudiaba. Tenía entonces mi héroe 15 años. Inició entonces una etapa de rabiosa formación autodidacta en la que leía todo cuanto había a su alcance. Esto llegó a preocupar a su padre, que decidió ponerle a trabajar, consiguiéndole un puesto como secretario.

Por las mañanas acudía al execrable trabajo y por las tardes leía pero obviamente tal rutina no satisfacía en absoluto sus altas aspiraciones. Por eso, decidió tratar de hacer negocios. No obtuvo éxitos, pero lejos de desanimarse intentó sacarle provecho a la adversa situación sirviéndose de las experiencias adquiridas como tema de una novela que escribió en cuatro meses y que se tituló Vivían Grey, publicada en forma anónima y la cual fracasó rotundamente. Abatido por el nuevo revés,enfermó, y sus padres decidieron abandonar Londres e instalarse en una casa en el campo. En medio de esta tranquilidad, Disraeli escribió dos relatos satíricos Popanilla y The Young Duke y, más tarde, tras un intenso recorrido por Europa dos novelas: Alroy y Contarini Fleming. La primera es un relato del viaje en forma epistolar y la segunda es una autobiografía también llena de deliciosos tonos satíricos. Es justo tras publicar Contarani Fleming que llegó a la conclusión de que su verdadera vocación era la política, ya que la literatura no colmaba sus amplias ambiciones. Regresó a Londres e inició una larga y fructífera carrera política que mucho contribuyó a consolidar el poderío imperial del Reino Unido. Pero la política no interrumpió nunca su vocación literaria. Disraeli se daría tiempo para seguir escribiendo. Fue ya siendo un prominente líder que publicó su obra más importante: Coningsby, o La Nueva Generación, una preciosa sátira sobre el mundo de la política.

Desde luego, más allá de lo que puede leerse en sus escritos, la sátira disraeleana conoció sus mejores momentos en las sesiones parlamentarias. Dueño de una abismal cultura, de un supemo sentido del humor y de incomparable agilidad mental, Disraeli solía hacer pedazos a cuanto político se atrevía ponérsele enfrente. ¡Y de qué políticos hablamos! En el Parlamento de Westminster entonces se encontraban gigantes como Robert Peel ( de quie D. dijo: ¡Cómo puede ser que un hombre inteligente carezca por completo de cualquier rastro de espíritu creador?), William Gladtone (It would be a tragedy if anybody were to push Mr Gladstone into the river and a disaster if anybody were to pull him out again) John Russell (You ought to learn that petulance is not sarcasm, and that insolence is not invective.) Nada de pejelagartos, Felipillo, foxes o cristinas K. Gente como ésta no era admitida en Westminster ni para limpiar las letrinas

No se trata de resumir en estos humildes parrafitos el colosal y azaroso trayecto político de mi ídolo (recomiendo ampliamente el estupendo libro The Lion and the Unicorn, de la que hice una reseña en http://pedroarturoaguirre.typepad.com/palacioarpinati/2008/06/el-le%C3%B3n-y-el-unicornio.html ) sólo diré que al finalizar su vida política Disraeli escribió una autosátira titulada Endimión, en la que narra la historia de un joven político que logra alcanzar el éxito gracias al favor de las mujeres.

Algunas citas del Gran Disraeli

A Conservative Government is an organized hypocrisy.
A consistent soul believes in destiny, a capricious one in chance.
A great city, whose image dwells in the memory of man, is the type of some great idea. Rome represents conquest; Faith hovers over the towers of Jerusalem; and Athens embodies the pre-eminent quality of the antique world, Art.
A majority is always better than the best repartee.
A man may speak very well in the House of Commons, and fail very completely in the House of Lords. There are two distinct styles requisite: I intend, in the course of my career, if I have time, to give a specimen of both.
A precedent embalms a principle.
A University should be a place of light, of liberty, and of learning.
Action may not always bring happiness; but there is no happiness without action. Adventures are to the adventurous.
Almost everything that is great has been done by youth.
An author who speaks about their own books is almost as bad as a mother who speaks about her own children.
As a general rule, the most successful man in life is the man who has the best information. As for our majority... one is enough.
Assassination has never changed the history of the world.
Be amusing: never tell unkind stories; above all, never tell long ones.
Beware of endeavoring to become a great man in a hurry. One such attempt in ten thousand may succeed. These are fearful odds. Characters do not change. Opinions alter, but characters are only developed. Circumstances are beyond human control, but our conduct is in our own power.
Colonies do not cease to be colonies because they are independent.
Conservatism discards Prescription, shrinks from Principle, disavows Progress; having rejected all respect for antiquity, it offers no redress for the present, and makes no preparation for the future.
Courage is fire, and bullying is smoke.
Damn your principles! Stick to your party.
Despair is the conclusion of fools.
Desperation is sometimes as powerful an inspirer as genius.
Diligence is the mother of good fortune.
Duty cannot exist without faith.
Every man has a right to be conceited until he is successful.
Every production of genius must be the production of enthusiasm.
Everyone likes flattery; and when you come to Royalty you should lay it on with a trowel. Experience is the child of thought, and thought is the child of action.
Fame and power are the objects of all men.
Even their partial fruition is gained by very few; and that, too, at the expense of social pleasure, health, conscience, life. Fear makes us feel our humanity.
Finality is not the language of politics.
Frank and explicit - that is the right line to take when you wish to conceal your own mind and confuse the minds of others. Genius, when young, is divine.
Great countries are those that produce great people.
Grief is the agony of an instant. The indulgence of grief the blunder of a life.
He was distinguished for ignorance; for he had only one idea, and that was wrong. How much easier it is to be critical than to be correct.
I am prepared for the worst, but hope for the best. I have been ever of opinion that revolutions are not to be evaded. I have brought myself, by long meditation, to the conviction that a human being with a settled purpose must accomplish it, and that nothing can resist a will which will stake even existence upon its fulfillment.
I must follow the people. Am I not their leader?
I never deny. I never contradict. I sometimes forget.
I repeat... that all power is a trust; that we are accountable for its exercise; that from the people and for the people all springs, and all must exist.
I say that justice is truth in action. If a man be gloomy let him keep to himself. No one has the right to go croaking about society, or what is worse, looking as if he stifled grief. If you're not very clever you should be conciliatory.
In a progressive country change is constant; change is inevitable.
In politics nothing is contemptible.
Increased means and increased leisure are the two civilizers of man. It destroys one's nerves to be amiable every day to the same human being.
It is much easier to be critical than to be correct.
King Louis Philippe once said to me that he attributed the great success of the British nation in political life to their talking politics after dinner.
Let the fear of a danger be a spur to prevent it; he that fears not, gives advantage to the danger. Life is too short to be little. Man is never so manly as when he feels deeply, acts boldly, and expresses himself with frankness and with fervor.
Like all great travellers, I have seen more than I remember, and remember more than I have seen.
Little things affect little minds. London is a roost for every bird.
Man is made to adore and to obey: but if you will not command him, if you give him nothing to worship, he will fashion his own divinities, and find a chieftain in his own passions. Man is not the creature of circumstances, circumstances are the creatures of men. We are free agents, and man is more powerful than matter. Man is only great when he acts from passion. Mediocrity can talk, but it is for genius to observe.
Moderation has been called a virtue to limit the ambition of great men, and to console undistinguished people for their want of fortune and their lack of merit. Moderation is the center wherein all philosophies, both human and divine, meet. My objection to Liberalism is this that it is the introduction into the practical business of life of the highest kind namely, politics of philosophical ideas instead of political principles.
Nationality is the miracle of political independence; race is the principle of physical analogy. Nature, like man, sometimes weeps from gladness.
Never apologize for showing feeling. When you do so, you apologize for the truth.
Never complain and never explain.
Never take anything for granted.
Next to knowing when to seize an opportunity, the most important thing in life is to know when to forego an advantage.
Nine-tenths of the existing books are nonsense and the clever books are the refutation of that nonsense.
No Government can be long secure without a formidable Opposition.
No man is regular in his attendance at the House of Commons until he is married.
Nobody is forgotten when it is convenient to remember him.
Nowadays, manners are easy and life is hard. Nurture your minds with great thoughts. To believe in the heroic makes heroes. One secret of success in life is for a man to be ready for his opportunity when it comes.
Plagiarists, at least, have the merit of preservation. Power has only one duty - to secure the social welfare of the People.
Read no history: nothing but biography, for that is life without theory.
Real politics are the possession and distribution of power.
Seeing much, suffering much, and studying much, are the three pillars of learning.
Silence is the mother of truth. Something unpleasant is coming when men are anxious to tell the truth. Success is the child of audacity.
Taking a new step, uttering a new word, is what people fear most.
Talk to a man about himself and he will listen for hours.
Teach us that wealth is not elegance, that profusion is not magnificence, that splendor is not beauty.
That fatal drollery called a representative government.
The best security for civilization is the dwelling, and upon properly appointed and becoming dwellings depends, more than anything else, the improvement of mankind.
The choicest pleasures of life lie within the ring of moderation.
The difference between a misfortune and a calamity is this: If Gladstone fell into the Thames, it would be a misfortune. But if someone dragged him out again, that would be a calamity. The first magic of love is our ignorance that it can ever end.
The fool wonders, the wise man asks.
The governments of the present day have to deal not merely with other governments, with emperors, kings and ministers, but also with the secret societies which have everywhere their unscrupulous agents, and can at the last moment upset all the governments' plans.
The greatest good you can do for another is not just to share your riches but to reveal to him his own. The health of the people is really the foundation upon which all their happiness and all their powers as a state depend.
The more extensive a man's knowledge of what has been done, the greater will be his power of knowing what to do.
The more you are talked about the less powerful you are. The palace is not safe when the cottage is not happy.
The people of England are the most enthusiastic in the world.
The practice of politics in the East may be defined by one word: dissimulation. The pursuit of science leads only to the insoluble.
The right honourable gentleman caught the Whigs bathing, and walked away with their clothes. He has left them in the full enjoyment of their liberal positions, and he is himself a strict conservative of their garments.
The secret of success in life is for a man to be ready for his opportunity when it comes.
The secret of success is constancy to purpose.
The secret of success is to be ready when your opportunity comes.
The services in wartime are fit only for desperadoes, but in peace are only fit for fools.
The very phrase 'foreign affairs' makes an Englishman convinced that I am about to treat of subjects with which he has no concern.
The view of Jerusalem is the history of the world; it is more, it is the history of earth and of heaven.
The wisdom of the wise and the experience of the ages are perpetuated by quotations.
The world is governed by very different personages from what is imagined by those who are not behind the scenes.
The world is weary of statesmen whom democracy has degraded into politicians.
The Youth of a Nation are the trustees of posterity.
There are three kinds of lies: lies, damned lies, and statistics.
There can be economy only where there is efficiency.
There is moderation even in excess.
There is no act of treachery or meanness of which a political party is not capable; for in politics there is no honour.
There is no education like adversity.
There is no gambling like politics.
There is no greater index of character so sure as the voice.
There is no waste of time in life like that of making explanations.
Things must be done by parties, not by persons using parties as tools.
Through perseverance many people win success out of what seemed destined to be certain failure.
Time is precious, but truth is more precious than time.
To be conscious that you are ignorant of the facts is a great step to knowledge.
To supervise people, you must either surpass them in their accomplishments or despise them.
To tax the community for the advantage of a class is not protection: it is plunder. Travel teaches toleration. Two nations between whom there is no intercourse and no sympathy; who are as ignorant of each other's habits, thoughts, and feelings, as if they were dwellers in different zones, or inhabitants of different planets. The rich and the poor. Upon the education of the people of this country the fate of this country depends.
War is never a solution; it is an aggravation. We are all born for love. It is the principle of existence, and its only end.
We cannot learn men from books. We live in an age when to be young and to be indifferent can be no longer synonymous.
We must prepare for the coming hour. The claims of the Future are represented by suffering millions; and the Youth of a Nation are the trustees of Posterity.
We moralize among ruins.
We should never lose an occasion. Opportunity is more powerful even than conquerors and prophets.
What is earnest is not always true; on the contrary, error is often more earnest than truth.
What we anticipate seldom occurs: but what we least expect generally happens.
When a man fell into his anecdotage it was a sign for him to retire from the world.
When little is done, little is said; silence is the mother of truth. Where knowledge ends, religion begins.
William Gladstone has not a single redeeming defect.
Without publicity there can be no public support, and without public support every nation must decay.
Without tact you can learn nothing.
Worry - a God, invisible but omnipotent. It steals the bloom from the cheek and lightness from the pulse; it takes away the appetite, and turns the hair gray.
You can tell the strength of a nation by the women behind its men.
You will find as you grow older that courage is the rarest of all qualities to be found in public life.
Youth is a blunder; Manhood a struggle, Old Age a regret. Youth is the trustee of prosperit

Cartas a la Reina de Corazones 3: Kahina de Mauritania


Reina:

Es el pueblo bereber amo absoluto del gran desierto del Sahara y el protagonista principal de la historia del Magreb, sin que por mucho tiempo se hayan reconocido sus innegables aportaciones a lo que hoy es el África musulmana. Desde el inicio de su antiquísima civilización los bereberes (con su rama principal tuareg) viven diseminados en las zonas costeras del Mediterráneo Norafricano y en amplios núcleos del interior de países modernos como Túnez, Argelia, Marruecos, Mauritania, Níger y Mali.
Quienes se quedaron en las orillas del mar desarrollaron desde hace siglos una civilización rural sedentaria, mientras los que se adentraron en el desierto son, hasta la fecha, nómadas dedicados a la cría de ovejas, cabras y bovinos.

El norte de África fue colonizado y dominado sucesivamente por cartaginenses, romanos y árabes, pero no sin que se verificaran constantes sublevaciones de los reinos bereberes, un pueblo amante de la libertad. En el siglo VI de la Era Cristiana llegaron los bizantinos, que restablecieron la administración y economía romanas, destruidas por los vándalos, y la ortodoxia católica. Los bereberes del interior, mientras tanto, siguieron con su vida nómada y organización tribal atacando con frecuencia las ciudades cercanas en busca de botín.

El pueblo bereber, siempre apegado a sus tradiciones, a su marco geográfico y a su organización igualitaria, opuso una resistencia tenaz a la invasión árabe, lo mismo que había resistido a los dominadores anteriores. Con la caída de Egipto en el 642, los árabes hicieron incursiones hacia el oeste y en el 649 llegaron por primera vez a Ifrikiya (hoy en Túnez) sin apenas encontrar resistencia bizantina, pero sí por parte de algunos grupos bereberes. Años después los árabes derrotaron definitivamente a los bizantinos e incorporaron toda la zona al mundo islámico. En el 675 el líder bereber Kusayla se convirtió al Islam y con él la mayoría de sus seguidores del Magreb central. Hizo un pacto con los árabes y los ayudó a expulsar definitivamente a los bizantinos. Sin embargo, los árabes no respetaron su parte del contrato e iniciaron una larga incursión conquistadora. El reino bereber no aceptó la soberanía de un califa lejano y desconocido. En el 690 los árabes contraatacaron y destruyeron a Kusayla tomando importantes bastiones bereberes del interior, pero sin lograr omar del todo al reino rebelde.
Es entonces que los bereberes deciden nombrar como su reina a Dahia al Kahina de Mauritania. En ese momento (año 690) ella fungía como la principal sacerdotisa de los pueblos bereber y tuareg nómadas. Tras ser coronada, no tardó en formar un ejército integrado por sus fieros bereberes y lo que quedaba de las tropas de Bizancio y de su reino Bereber. Todos los historiadores la consideran una implacable luchadora por la libertad de su pueblo y líder indiscutible de la resistencia contra la dominación del islam.

Al Kahina, que en árabe quiere decir "la sacerdotisa", presentó su heroica resistencia en lo que hora es Argelia, pero que en aquel entonces era denominado como “la Mauritania”, por eso se le conoce como Dahia al Kahina de Mauritania aunque su reino no coincida geográficamente con la actual Mauritania. Los historiadores musulmanes la han descrito como sumamente bella en su juventud, de abundante y larga cabellera oscura y madre de tres hijos (dos varones y una chamaquita). Incluso se le atribuían facultades de profetisa. Otra característica interesante fue que la religión que profesaban los bereberes nómadas de Dahia era la judía, en contraposición con las religiones de los pueblos dominadores, cristianos y musulmanes.

Cuando Dahia asume como reina bereber era ya viuda y ya estaba más que grandecita No se conoce bien la fecha de su nacimiento, pero rondaba los 65 años. Pese a su edad derrotó con su astucia de genial estratega militar a los árabes en las batallas de Tehuda, Wadi y Meskiana Con estas victorias fue capaz de perseguir a los árabes hasta Cirenaica, (en la actual Libia). La tenaz y efectiva resistencia de la Kahina retrasó la conquista árabe por décadas, pero no la pudo vencer. Los árabes, más fuertes y organizados, terminaron por imponer una política de terror con los pueblos aliados de la Kahina en todo el territorio norafricano. Con su coalición debilitada, el reino bereber empezó a ceder poco a poco, hasta que en la definitiva batalla de Tarfa la Kahina fue derrotada y asesinada por sus adversarios árabes. Donde encontró la muerte conserva aún el nombre que le dieron los mismos árabes eb honor a su digna adversarias: Bir al-Kahina ("Oasis de la Kahina").

En la vigilia del último combate, la Kāhina, sabedora de su irremediable y trágico destino, pidió a sus dos hijos no luchar a su lado y aliarse con los vencedores antes de la batalla. Por consiguiente, el emir árabe nombró, tras la conversión de estos al Islam, al hijo mayor gobernador del Aures, y al otro hijo jefe de las milicias bereberes de Gerawa.
Esta es la historia de esta otra reina valiente y extraordinaria que nos da desde el continente africano un formidable paradigma de pundonor, dignidad, inteligencia y estoicismo. Injustamente olvidada por la historia, hoy la rescato para ti en esta cartita que te escribo con mucho amor.
Te quiere mucho

Aguirre

lunes, 10 de agosto de 2009

Cartas a la Reina de Corazones 2: Yaa Asantewa de Ghana




Reina:

¡No sabes el gusto que me da escribirte estas cartas sobre las reinas injustamente olvidadas de la historia y aprender juntos sobre tan maravillosas personalidades femeninas! Hoy te quiero hablar de la reina Yaa Asantewa (1850-1921) y de su heroico y civilizado pueblo Ashanti. Se trata de una de las figuras más reverenciadas de la historia de Ghana. Encabezó una gallarda resistencia en contra de los colonizadores británicos. La mayor parte de los habitantes de la región de Ghana y Costa de Marfil pertenecen al grupo étnico Ashanti (de ahí agarró su nombre una cantante contemporánea) cuya cultura es una de las más interesantes del mundo. Por siglos habían luchado denodadamente por mantener su independencia y para evitar ser esclavizados por los europeos, quienes se instalaron en la actual Accra donde fundaron donde establecieron uno de los mas ominosos centros de trata de esclavos del continente. En 1900 el Gobernador británico de Accra derrotó al rey Ashanti, fundó la colonia británica de Costa de Oro y exigió a las autoridades la entrega el Taburete Dorado, máximo objeto de veneración y símbolo de soberanía e independencia de los Ashanti. Temerosos de emprender otra guerra contra los británicos sin posibilidades de triunfo, los líderes Ashanti estaban decididos a acceder. Pero entonces, muy indignada, Yaa Asantewa, Reina Madre y guardiana del Taburete Dorado, se puso en pie y dijo, “¡No puedo creerlo! Si ustedes, los hombres Ashanti no resisten dignamente, entonces nosotras las mujeres lo haremos. Nosotras lucharemos contra los blancos hasta que la última caiga en los campos de batalla”. Avergonzados, los guerreros Ashanti nombraron a Yaa Asantewa reina con plenos poderes para que encabezara a la nación en la última guerra ashanti contra los británicos.

La cultura ashanti presenta muchos rasgos matriarcales importantes. La figura de la madre es muy venerada y las mujeres son entrenadas para participar en todos los aspectos importantes de la vida, incluida la guerra. La reina Asentewa movilizó a más de 30,000 guerreros e impuso un cerco de tres meses al fuerte británico de Kumasi. Los ingleses se vieron forzados a llevar a miles de soldados y artillería para romper el sitio. Poco después, en una inicua venganza, las tropas británicas destruyeron numerosas poblaciones ashanti y confiscaron sus tierras. Capturaron a la Reina Yaa Asantewaa y la desterraron a las Islas Seychelles, en la costa del este de África, mientras la mayoría de los jefes fueron hechos prisioneros. Veinte años después, Yaa Asantewa murió en el destierro mientras los británicos establecían la colonia de Costa de Oro y mantenían secuestrado el Taburete Dorado para mayor humillación de los ashanti.

La cultura ashanti es muy, muy rica. Es famosa por su cerámica, su arquitectura en adobe (como el lomito adobado) sus estatuas y sus textiles. También mucho destacan su mitología y la interesantísima simbología Adinkra. Hablamos de una civilización que durante los siglos XVIII y XIX fue capaz de constituir un poderoso reino capaz de establecer una forma de gobierno muy sólida. Tuvo sus orígenes en el enriquecimiento que supuso la exportación de oro durante el periodo de 1550 a 1650. En el año 1697 el Asantehene (rey) Osei Tutu, unificó bajo su mandato a todo el pueblo ashanti, creando el poderoso Reino de Ghana, bautizado así como reminiscencia de un imperio cuasi mítico bastante anterior. Para extender el poder de su reino, Osei Tutu, junto con su sacerdote principal, cambió la constitución y la regalía ceremonial (telas, ornamentos, y decoraciones). Especial importancia le dieron al trono real, que más que trono es una especie de taburete que era todo di’oro. La leyenda dice que este Taburete Dorado que había descendido del cielo y simbolizaba la nación de Ashanti. También se creó la fiesta nacional "Odwira" en que anualmente los asanti se congregan después de la cosecha del ñame (cacao) para celebrar su unidad con su reino.

Su mitología tiene, entre otros interesantes personajes, a Anansi, hijo de Nyame, dios de los cielos y de Asase Ya, diosa de la tierra y de la fertilidad. Anansi, conocido también con "La Araña", es un intermediario entre Nyame y los seres vivos de la tierra. El es el responsable de traer la lluvia y de controlar las fronteras de los océanos y de los ríos durante las inundaciones. Anansi, es considerado como el creador del sol, de la luna y de las estrellas, mismas que te piensa bajar pronto el osito. También instituyó la sucesión del día y de la noche y creó el primer hombre, a quien Nyame insufló la vida, y enseñó a la humanidad cómo sembrar el grano, cómo utilizar herramientas en los campos y como tejer. El tejido es primordial en la cultura Ashanti y los tejedores y tejedoras son reverenciados.

Otro aspecto apasionante de los ashanti es la simbología Adinkra. Se trata de una muy amplia colección de símbolos que representan conceptos o aforismos. Son usados como ornamento en ropas, tejidos, logotipos, etc. Se usan mucho en las bufandas ceremoniales.

En la actualidad la memoria de la reina Yaa Asantewaa Festival es honrada todos los meses de agosto en un fastuoso festival que es toda una explosión de música, poesía y colores. Es ahí donde se hace la tradicional intercambio de kentes, esas preciosas bufandas ceremoniales que son tan apreciadas por los ashanti. Los significados de los kentes son muy profundos. Al intercambiar un kente se establece una asociación fraternal entre los involucrados de amistad, amor, solidaridad y comprensión. Asimismo, los kentes se tejen para celebrar acontecimientos trascendentales o a personas muy destacadas. Los grandes personajes de la historia del pueblo ashanti tienen su propio estilo de kente. Por ejemplo, al fundador de la moderna Ghana le hicieron su Kente-Nkrumah, al ex secretario general de la ONU su Kente-Annan y, evidentemente, a nuestra valiente reina de hoy su Kente-Asentewa.

Aguirre

lunes, 13 de julio de 2009

Cartas a la Reina de Corazones 1: Nzinga de Ndongo


Reina de Corazones:

Pensando en temas bonitos para tratar en estas cartitas de domingo de reina y evitar caer en la fruslería de hablar de la vida cotidiana se me ocurrió que sería interesante hablar de reinas destacadas de la historia. Claro, lo primero que pensé fue en abordar a majestades gigantescas como Isabel I, Catalina la Grande, Teodora de Bizancio o Isabel la Católica, pero reconsideré y, de acuerdo contigo, dedicaré este espacio a rescatar la memoria, para nosotros, de reinas no tan conocidas pero que, sin embargo, se destacaron por su gallardía, inteligencia, dignidad, buen gobierno e incluso –alguna- por su crueldad.

Investigando sobre el tema, descubrí que hay una cantidad interesante de reinas africanas que sobresalieron de forma extraordinaria en la historia de sus desdichados pueblos. Por eso las elegí para iniciar con este ciclo de reinas africanas, todo ellas magníficas personalidades injustamente olvidadas por la historiografía occidental, pero que en sus naciones son, hasta la fecha, heroínas nacionales.

Has de saber, reinita de mi corazón, que antes de que llegaran los colonizadores a asolar a África existía ahí una gran cantidad de reinos e imperios que por los siglos florecieron y decayeron. El papel de la mujer en estos lares era mucho más destacado del que se le permitía tener a la sazón en Occidente y en Oriente, de ahí que no fuera raro encontrar reinas gobernando a muchas de estas naciones. Uno de estos reinos era el mbundu de Ndongo, ubicado en lo que ahora es Angola. Al rey de Ndongo se le daba el título de “Ngola”, de ahí el nombre de la nación actual. Hacia mediados del siglo XVI los portugueses llegaron al reino de Ndongo y establecieron la ciudad de Luanda (hasta la fecha capital del país Angola), la cual fue convertida en su centro de operaciones para el desarrollo del mercado de esclavos con destino a América (sobre todo a Brasil). Salía una media anual de 10,000 esclavos, convirtiéndose Luanda, junto con Costa de Oro (la actual Ghana, de donde son los Kentes Nkrumas) y Senegal en los principales exportadores de esclavos del continente. El pusilánime Ngola de Ndongo, a cambio de la independencia de su reino, colaboraba con los portugueses en la captura de esclavos de otros reinos vecinos, con la condición de que se respetara a sus súbditos, pero muy pronto las exigencias de los pérfidos portugueses fueron aumentando y con ellas el desacuerdo respecto a las condiciones que los portugueses imponían al Ngola, la más ominosa de ellas: la exigencia de que todos los “ndonguenses” se bautizasen en la religión católica.

Ah, pero las cosas cambiarían pronto. En 1580, nacía una mujer extraordinaria, Nzinga Mbandi, cuyo nombre es, hasta la fecha, símbolo de la lucha por la independencia que Angola mantuvo contra Portugal. Mujer de extraordinaria inteligencia era hermana de Ngola y a ella le correspondían los derechos de sucesión al trono, ya que contra la costumbre europea ésta no se transmitía de padre a hijo sino de hermano a hermano o hermana. No existía casi en ningún reino africano restricciones sucesorias a causa del sexo.

Nzinga Mbandi aprendió a hablar portugués e incluso holandés (por ahí andaban también esos canijos) y ejerció como la principal consejera política de su hermano y como representante diplomático ante el reino de Portugal, siendo ella la firmante de varios acuerdos y tratados con los portugueses. Como muestra de buena voluntad, tras la firma de uno de estos tratados, se hizo bautizar como Doña Ana de Sousa. En 1624, tras la muerte de su hermano, llega al trono y casi de inmediato abandona su nombre cristiano, al igual que sus hermanas Kifunji y Mukumbu (Gracia y Bárbara). Las arbitrariedades de los portugueses habían sido ya demasiadas. La Nueva Ngola Nzinga se marcó como objetivo recuperar la independencia política y territorial de su pueblo ante los portugueses quienes, temerosos de perder el dominio del territorio y, por lo tanto, su lucrativo e infame negocio del tráfico de esclavos, Nzinga Mbandi y nombran a un nuevo rey palero. Ella abandona el reino, instalándose en la región vecina de Matamba (de ¡Matamba, dijo la changa!) y crea ahí un reino, el cual se dedica a la formación de una gran alianza entre todos los reinos locales enemigos de Portugal, incluyendo a los holandeses. Después de unos años de esfuerzo, en 1630 levanta un gran ejército en el que participan los reinos de Matamba, Kasanje, Congo, Dembo, Kissama y los Pueblos del Planalto Central.

Nzinga demostró entonces sus grandes capacidades de liderazgo, organización y mando. La coalición africana derrotó a los portugueses en la batalla de Mbaka (1643) y de ahí se sucedieron algunos años de victorias. De hecho, mucho de lo que sabemos de la reina Nzinga lo debemos al testimonio de uno de sus aliados de estos años de gloria, un capitán holandés de apellido Fuller, quien cuenta que la Ngola de Matamba, además de destacar por su aguda inteligencia, como estratega militar y buena gobernante, tenía lrededor de ¡Cincuenta esposos!, pues era una mujer de impresionante belleza.

Pero pronto llegarían los reveses. En octubre de 1647, su hermana Kifunji, que importante dirigente religiosa y miembra clave de su gobierno, pierde la vida envenenada. Poco más tarde, en una emboscada, es hecha prisionera su hermana Mukumbu, la cual es arrojada a la hoguera. El 10 de agosto de 1648, Nzinga sufrió una gran derrota cuando Luanda es recuperada por las fuerzas portuguesas. Tras esta derrota, la reina se retiró nuevamente al reino de Matamba, el cual no pudo ser conquistado por los portugueses en tanto la reina Nzinga se mantuvo con vida, cosa que sucedió hasta en 1663. Y por eso yo digo:

Angola,
Angola,
Angola,
¡No estás sola!

Te preparé reinita, una minipresentación con imágenes relativas a la reina NZinga la cual viene anexa. Ojalá te guste. Le puse música africana, A eta sí hazle clic para avanzar, ya que está cortita.
Te mando muchos besos en tu domingo de Reina.
Aguirre

miércoles, 20 de mayo de 2009

El Empalador, ¿Empalado?


El brutal y sangunario Vlad Tepes III, el famoso Voivoda de Valaquia que inspiró, en alguna medida, al personaje famoso de Bram Stoker, era un reprersor sexual. Raro en alguien a quien le encantaba empalar a enemigos, criminales amigos y a cuanto cabrón se le atravesara, casi, casi.

Como es bien sabido, a este personaje le encantaba empalar a sus enemigos. Sin embargo, era un gran reprimido sexual. Como es bien sabido, la forma favorita de ejecución de Vlad fue, sin duda alguna, el empalamiento. Para realizarlo se utilizaban dos caballos que tiraban de cada una de las piernas del condenado mientras introducía una estaca más o menos afilada por su cuerpo. El final de la estaca solía estar bañado en aceite, a manera de lubricante, y se tenía cuidado de no afilar demasiado la estaca para no producir una muerte demasiado repentina que evitara el sufrimiento. El palo o estaca solía ser introducido por el trasero. Con el peso del condenado la estaca penetraba, poco a poco, el cuerpo del condenado hasta que salía por la boca. La muerte por empalamiento tardaba horas y, a veces, días en llegar. Además, los cuerpos permanecían allí durante meses, a pesar de la descomposición. Claro, el empalamiento el único método de tortura o ejecución de Drácula. Otros de sus métodos eran clavos en la cabeza, cortar los labios, cegar, estrangular, quemar, cortar narices y orejas, mutilar los órganos sexuales, arrancar la cabellera, arrancar la piel, exponer a los elementos o a animales salvajes, hervir vivas a sus víctimas un un tan largo como imaginativo etcétera, pero o suyo, lo suyo era empalar.
Sin embargo, pesar de que usaba este método de obvias connotaciones eróticas, Vlad era un gran represor (y reprimido) sexual. Vlad impuso a sus "felices" gobernados un estricto código de conducta sexual que proscribía la prostitución, el adulterio, el homosexualismo y el sexo pre marital. Obviamente, los castigos eran inicuos. Las mujeres que no eran castas, las doncellas que perdieran su virginidad, las esposas adúlteras o las viudas que no respetaban la memoria del finado eran empaladas con estacas al rojo vivo que introducía por su vagina. A los gays primero les arrancaba los órganos genitales y despues venía la empaladita anal (con una estaca, se entiende).
¿Por qué Vlad tendría esta fijación con las empaladas y, al mismo tiempo, odiaba todo lo que fuese alegre sexo? Se me hace que al Empalador se lo empalaron, y por eso. Sí, resulta a los 13 años su padre, Vlad II, decide luchar junto a los turcos (sus enemigos tradicionales), frente a los húngaros y, como prueba de ello envía a sus hijos Vlad y Radu como invitados-rehenes a la corte del sultán. Allí pasa 4 años hasta que su hermano Mircea y su padre son asesinados por los húngaros. En aquel momento, el príncipe de Valaquia era elegido por los nobles de entre los miembros de la familia real. Dicha familia tenía dos clanes rivales: el de los Danesti y el de Vlad y su padre. Con la muerte de Vlad II los húngaros consiguen poner a un Danesti como príncipe marioneta. Los turcos deciden entonces armar a Drácula y le dan soldados para que acuda a Valaquia a reclamar su trono. Cosa que consigue. Pero ya para entonces....bueno, los otomanos no se andaban con chiquitas. Se me hace que los turcos se lo han de haber empalado hasta por las orejas. De ahí su fijación al palo y su odio al sexo

Se afirma que en 1462 podría haber asesinado a 100,000 personas. Dejaba todos los cuerpos empalados en la entrada a la capital, de manera que todo el mundo contemplara el castigo que podrían sufrir y, para asustar a posibles invasores. El "bosque de los empalados", le decían a tan ingrato espectáculo.

Otras anécdotas de Vlad (tomados de la estupenda novela La Historiadora, de Elisabeth Kostova, una profunda investigación sobre la vida y muerte del Drácula original).

Mensajeros turcos: A unos mensajeros turcos les preguntó que por qué eran tan irrespetuosos y no se sacaban el turbante en muestra de respeto ante su presencia. Los mensajeros respondieron que no acostumbraban a hacerlo. Vlad decidió reforzar sus costumbres y los devolvió a Estambul con los turbantes clavados a los cráneos, para que nunca se los sacasen.
El comerciante:Un día, un comerciante florentino se presentó en su castillo para denunciar que le habían robado una bolsa de monedas de oro. El príncipe le dijo que volviera al día siguiente. Cuando el mercader retornó al día siguiente, los ladrones y todos los miembros de sus familias estaban empalados en el patio de castillo. Frente a ellos, Vlad en su trono y la bolsa robada.Entonces el Empalador le pidió al comerciante que contara las monedas de la bolsa, para comprobar si faltaba alguna. El aterrorizado extranjero las contó cuidadosamente, y probablemente demasiado asustado para mentir, musitó finalmente:-Sobra una.Vlad le contestó:-Tu honradez te ha salvado. Si hubieras intentado quedártela, habrías acabado en la estaca más alta, junto con éstos.

Las caravanas de comerciantes: Ocurrió que unas caravanas de comerciantes alemanes en su ruta desde Serbia hasta Hungría no llegaron a pararse en Valaquia y comerciar con Vlad. Éste, al enterarse de la falta de respeto hacia él y su pueblo, mandó capturar las caravanas y asesinar a los 600 comerciantes que las componían exceptuando a dos, a uno de ellos le sacó los ojos y a otro le cortó la lengua y les hizo volver con las cabezas de los comerciantes a Serbia y las estacas que había utilizado para empalarlos.

El monje empalado: Un día cuando Vlad paseaba con un monje junto al famoso bosque de empalaos, éste le dijo que el hedor era insoportable, pero se lo dijo en tono de sorna, mu mamón. Vlad le miró con ojos incendiarios y ordenó que lo empalaran en el palo más alto que hubiera. Cuando el monje ya estaba empalado el príncipe le preguntó " ¿Allá arriba hueles mejor, o prefieres un palo más alto, cabroncito?"

El voivoda Dan: Otra de sus acciones fue la muerte al voivoda usurpador Dan, a causa de que éste quiso derrocar a Vlad del poder de Valaquia. Dan fue obligado a cavar su propia tumba y a limpiar la estaca que se iba a utilizar en su ejecución (previamente embarrada en excremento) con la lengua .

Los monjes mendigos: Cuando Vlad fue de visita a un pueblo de Valaquia, vio como dos monjes le pedían limosna. El príncipe les preguntó que por qué pedían limosna si podían vivir sin penurias colaborando en cualquier iglesia y éstos le respondieron que mendigando podrían saber si iban a entrar o no en el reino de los cielos, a lo que Vlad les dijo "faltaba más, esa duda se las quito de inmdiato" y ¡Palo!

La copa de oro: También puso en la plaza de la capital de Valaquia, Tirgoviste, una copa de oro para que todo el mundo bebiera de ella, con la advertencia de que aquel que la robara se sometería a la justicia del príncipe. Huelga decir que durante los años de su reinado nadie osó robar la copa de oro. Al lado de la copa puso un cofre abierto adornado con zafiros y rubíes que siempre estaba lleno de zanahorias para que qien pasara pudiera mitigar un poco el hambre. Al lado del cofre, el implacable letrero que rezaba "Tú dirás que prefieres: zanahoria o palo

sábado, 4 de abril de 2009

Kundera octogenario


Me impoirta un carajo que los snobs lo consideren un escritor de moda. Kundera es grande y sus novelas son, casi todas extraordinarias. Vaya hoy un modesto homenaje. El 1 de abril de 1929, hace ochenta años, nació Milán Kundera en una ciudad de Checoslovaquia (ahora República Checa). ¿Cuál? No sé. Estudiante de cine y literatura, su vida estuvo marcada por el régimen comunista que se instaló en su país después de la Segunda Guerra Mundial, siendo expulsado en dos ocasiones del Partido Comunista Checo y llegando a prohibirse sus obras tras la ocupación rusa de Checoslovaquia en 1968. Unos años después, en 1975, consiguió emigrar a Francia donde continuó su trabajo como escritor. Allí publica su obra más conocida, La insoportable levedad del ser, libro que no fue publicado en su país de origen hasta veinte años después. En él relata la vida, las relaciones, de cuatro personajes, en un marco de represión política, desde un punto de vista existencialista y con la capacidad de elección y el eterno retorno como centro. Esta obra se considera fundamental para entender la vida cotidiana en los países soviéticos y, por tanto, la disidencia política.

Kundera vive en París, alejado de la popularidad y de los medios a los que no ha concedido una entrevista en dos décadas. Tampoco fue a su país a recoger el Premio Nacional Checo de Literatura en 2007 por problemas de salud, un premio más que merecido para el que seguramente es, con el permiso de Kafka, el autor checo más conocido fuera de su país.
A principios del año pasado se hizo pública una noticia que empaña en cierta medida la figura de Kundera, sobre todo para aquellos que querían verlo como ejemplo de anticomunismo. Según consta en los archivos, en 1950 Kundera denunció a un compatriota suyo, sospechoso de ser espía, a la policía checa, pasando este catorce años en la cárcel por culpa de esta denuncia. Esta noticia sí hizo romper a Kundera su silencio mediático para desmentir este hecho, llegándose a afirmar que los archivos de la policía están manipulados. Sea como sea, nos quedamos con sus libros.

jueves, 26 de febrero de 2009

Conrad, el Inagotable


Recuerda Javier Marías: "Los libros de Joseph Conrad son tantos y tan memorables que siempre se piensa en él a bordo de un velero y se olvida que los últimos treinta años de su existencia los pasó en tierra, llevando una vida insospechadamente sedentaria". Ello viene a cuento de esta reciente edición de "Crónica personal", las memorias del celebrado escritor, cuyo nombre figura entre los más grandes autores del siglo XX. Fueron redactadas a pedido de su editor, el escritor Ford Madox Ford, y sus siete capítulos los terminó de escribir hace un siglo.
Nacido en 1858 en la ciudad polaca de Berdyczew, Conrad perdió a su madre a los ocho años; su padre (traductor de Shakespeare, Hugo y Alfred de Vigny) se hizo cargo de la educación de su hijo. Hacia 1869, Conrad hizo un viaje a Bohemia y Suiza, y por esa época nació la idea de hacerse a la mar. Y lo hizo, a los dieciséis años, partiendo hacia Marsella.
Joseph Conrad escribió sus cuentos y sus novelas más que con su fantasía con su poderosa memoria, y, en la mayoría de los casos, sus narraciones están construidas a partir de experiencias reales, vividas o presenciadas desde diversa distancia. Su obra aparece marcada por la infancia, por la atracción por la aventura y la ambición romántica de recrearla, que es una forma de revivirlas. En el barco "Tremolino", Conrad terminó su experiencia francesa. Luego fue aceptado en el vapor británico "Mavis", que viajaba a Constantinopla y el mar de Azov, iniciando de esta manera una nueva etapa de su vida.
Recién lo encontramos en tierra, en Inglaterra, tras veinte años de vida en el mar. Realizó una larga serie de viajes, por Australia, la India, Malasia, Indochina, Isla Mauricio. Ascendido en los escalafones del mando, llegó a capitán. Cabe suponer que ellos resultaron ricos en experiencias, ya que luego constituyeron una fuente inagotable para su labor literaria. La necesidad de escribir fue tardía. Era ciudadano británico, en 1889, cuando se decidió a contar historias. En ellas, "Crónica personal", recuerda que optó para sus escritos la lengua inglesa, porque consideraba al francés una lengua "cristalizada". Respecto de esta decisión, dice Borges: "Lo escribió con ese cuidado y esa pompa ocasional que son propias de la prosa francesa".
Entre sus grandes títulos, deben mencionarse "La locura de Almayer", "Juventud", "El negro del Narciso". Borges consideraba que su obra maestra era "Lord Jim". De sus libros como "El agente secreto" y "Nostromo", dijo Cesare Pavese que alcanzaban "las cimas de la poesía".
Alejado de los cenáculos literarios y de las corrientes estéticas de su tiempo, fue amigo de Sthepen Crane y de Hudson. No sabemos hasta qué punto fue consciente de la ruptura que su obra suponía con respecto de la tradición narrativa, pero puede afirmarse, que es un maestro de la novela moderna. Murió repentinamente, en su Kent, en 1924, a los sesenta y seis años.
Novedades editoriales. Acaba de regresar la espléndida colección de cuentos del maestro del género, O`Henry (1862/1910), uno de los grandes escritores estadounidenses de comienzos del siglo XX. Sus relatos, que atrapan desde la primera línea, y se orientan hacia un final siempre inesperado, crearon escuela, y hoy se siguen leyendo con el mismo interés del primer día.